La donación sigue siendo la única fuente proveedora de sangre.  La mayor parte de los procedimientos de salud complejos tiene la probabilidad de necesitar de ella, y hoy el stock en la Región Metropolitana está a la baja. Tratamientos de enfermedades que producen anemia, intervenciones quirúrgicas, partos, hemorragias, quemaduras y accidentes, entre varias otras rutinas requieren de su uso y sin donantes, la situación se vuelve compleja.

Para precisar la situación, el Hospital Padre Hurtado cuenta hoy con 7 unidades de glóbulos rojos O+, siendo lo óptimo contar con 45 Unidades. Esta baja es permanente, los pacientes que tienen una cirugía programada no están cumpliendo con su cuota de donantes y las embarazadas que deben aportar con 2 donantes tampoco lo están haciendo. Comúnmente, el procedimiento de una cesárea o parto normal, no requiere sangre, sin embargo, cuando existe una urgencia en cualquiera de los dos casos, se vuelve muy complejo, ya que las pacientes pierden mucha sangre y ante el apremio se debe utilizar en altas dosis. Es por este motivo que en todos los hospitales públicos del país se les solicita dos donantes, considerando además, que cuentan con un periodo de tiempo de 9 meses para conseguirlo. Es así como ayudaría a mantener un flujo constante, motivo por el cual se hace imprescindible cumplir con el requerimiento.   

Hace 24 años Claudia Arancibia trabaja en el Hospital Padre Hurtado, es Tecnóloga Médica y Coordinadora de la Unidad de Medicina Transfusional, ella señala que el foco hoy está puesto en Unidad de la Mujer donde no están llegando donantes de embarazo, generando un déficit aproximado de 600 donantes al mes, en una unidad donde se atienden alrededor de 300 partos mensuales. “Aunque trajeran 1 de los 2 donantes que se les solicita, serían 300 unidades al mes, que hoy no tenemos y con lo que podríamos cubrir la brecha”, señala la coordinadora.

Nuestro hospital necesita 18 donantes diarios para operar de manera óptima, mientras que la Región Metropolitana debería disponer de 400 donantes de sangre por día. Una cifra elevada para la realidad local, donde normalmente apenas se llega al 65% de la cantidad ideal. El panorama es más complicado que en años anteriores, según las cifras del Centro Metropolitano de Sangre, “el promedio de atención diaria durante el mes de diciembre de 2020 fue de 217 donantes. Muy bajo, y todas las donaciones que ingresan un día se van al siguiente, es decir, no alcanzamos a mantener el stock”, señala su directora, Loretto Vergara, quien ha encendido las alertas y ha hecho el llamado a través de los medios de comunicación.

La política de sangre a nivel país se trabaja en red, mediante el Centro Metropolitano de Sangre y Tejidos, que abastece a los hospitales públicos de la Región Metropolitana y desde ahí también realizan el llamado a donar sangre con el fin de revertir la baja donaciones. El grupo O Rh + es el más requerido en nuestra población por lo que se necesita mantener un stock importante por sobre las 900 unidades de componentes sanguíneos para garantizar las necesidades transfusionales de los hospitales. El asegurar la provisión evita postergaciones de cirugías o prolongación de hospitalizaciones por escasez de este grupo.

Esa es la razón por la que hacemos este llamado a donar sangre. Un gesto altruista que puede ser necesario para nuestros seres queridos o para quien no conocemos. Hoy más que nunca, un acto lleno de solidaridad.